-

Noticias Amor y Rabia

La digitalización y el asalto al poder de Silicon Valley

Published on: sábado, 27 de febrero de 2021 // ,


por Rabioso


14 de febrero de 2021


ESCLAVITUD, ESPEJUELOS E IMÁGENES


2021 pasará a la historia por varios motivos, pero el más importante de todos no es el Coronavirus, sino el impulso brutal que ha recibido el proceso de digitalización debido a las medidas contra el Coronavirus. La digitalización continúa el proceso iniciado por la contrarevolución neoliberal, al acelerar la concentración de capital y poder en pocas manos. Básicamente, la digitalización consiste en la toma del poder sobre el mundo real de los monopolios creados gracias a la privatización del mundo digital/virtual, y algunos autores avisan que las élites de Silicon Valley están sentando las bases de un neofeudalismo (1). Este proceso se ha llevado a cabo ante nuestros ojos sin que fuésemos conscientes de sus implicaciones y la izquierda, sin ir más lejos, lo ha impulsado inconscientemente al abandonar sus medios de comunicación tradicionales, que al estar impresos estaban al 100% bajo su control -desde su creación hasta su distribución- y los ha sustituido por otros digitales, pasando a depender al 100% de plataformas digitales como Facebook, Twitter o Google para hacer llegar contenidos a sus lectores.


De la misma forma en que las potencias coloniales europeas cambiaban baratijas y espejuelos por habitantes de África en las etapas iniciales del comercio de esclavos, las plataformas digitales nos han convencido para entregarles el control de nuestros datos y de nuestra capacidad de poder comunicarnos a cambio de unos medios digitales llenos de imágenes y colores. El resultado ha sido que estamos, a día de hoy, en manos de corporaciones que en cualquier momento nos pueden borrar digitalmente, sin que podamos hacer nada para impedirlo. En pocos años, hemos pasado de preocuparnos por lo que hacen las plataformas digitales con nuestros datos, a poder ser borrados en la vida real, al poder despojarnos de nuestra capacidad de comunicarnos debido al monopolio que han alcanzado. Al mismo tiempo, dichos monopolios se han convertido en la élite del capitalismo, desplazando a la élite del capitalismo industrial: Amazon vale hoy tanto como todas las empresas de la bolsa alemana.



BIDEN Y EL GOLPE DE SILICON VALLEY


Era sólo cuestión de tiempo que su poder de facto, que no tiene nada que envidiar al de un monarca absolutista, se convirtiese en poder real. Y para ello no solo disponían de los medios, sino que también tienen experiencia en como someter al poder político, gracias a su papel en los “golpes blandos o “revoluciones de colores” de las últimas décadas. La inesperada victoria de Trump en 2016, gracias a su hábil manipulación de las redes sociales pese a que sus jefes apoyaban al Partido Demócrata, y el temor a que lo repitiese en las pasadas elecciones, motivó que las élites de Silicon Valley se uniesen para asegurarse de que su partido -Biden recibió 10 veces más dinero que Trump de las empresas de Silicon Valley y sus empleados- ganase las elecciones para la presidencia de EEUU.


El primer paso fue el empleo de algoritmos para censurar mensajes de los seguidores de Trump durante la campaña electoral, algo que fue anunciado y justificado públicamente como un medio para impedir la difusión de fake news (2); el objetivo era impedir que Trump volviese a usar en su beneficio las redes sociales, que en 2016 jugaron un papel clave en su victoria electoral (3), y de esta forma favorecer a Joe Biden, el candidato demócrata.


El segundo paso fue bloquear de manera activa las noticias que podían perjudicar a Biden, algo que se pudo comprobar en la censura y bloqueo de las noticias del New York Post sobre la corrupción del hijo de Biden (4), y la eliminación de cuentas que hablaban de ello (5). Estas medidas han tenido una influencia decisiva en la percepción de la realidad, y no han sido espontáneas, sino parte de una conspiración “para salvar las elecciones” por parte de “un grupo de personas poderosas”, según la revista Time (6). Esta campaña de censura masiva ha afectado a los resultados beneficiando al Partido Demócrata, como no podía ser de otra forma (7).


La falta de atractivo de Biden entre sus propios votantes se reflejaba en las redes sociales: en Twitter, Trump tenía 85 millones de seguidores, 10 veces más que Biden (8,1 millones). Y la situación se repetía en Instagram, donde Trump tenía más de 21 millones de seguidores, siete veces más que Biden (3,1 millones), y en Facebook, donde Trump tenía 30 millones de seguidores, doce veces más que Biden (2,5 millones). La reacción de las redes sociales, abiertamente favorables a Biden y que participaban en su campaña electoral, fue utilizar la censura contra Trump (FUENTE) 


El tercer paso, tras declarar vencedor a Biden mientras aun tenía lugar el recuento de votos, fue una escalada in crescendo de represión hacia Trump y sus seguidores: tras la censura se dio paso a la eliminación de cuentas de destacados seguidores de Trump de las redes sociales, y finalmente se borró la de Trump cuando aún era presidente de EEUU. Esta demostración de poder, inimaginable hace tan sólo unos pocos años, ha sido calificada por Edward Snowden de “momento clave en la lucha por la libertad de expresión en el mundo digital”, y el propio jefe de Twitter, responsable de tomar la decisión, intentó justificarla posteriormente en un hilo, asegurando que “fue la decisión correcta” pero reconociendo también que establecía “un peligroso precedente” (8); pero Twitter no tardó en beneficiarse de colaborar con la purga.


Finalmente, el cuarto paso ha sido destruir Parler, una red social que no estaba controlada por los gigantes de Silicon Valley y que precisamente por eso crecía rápidamente, amenazando el monopolio de Twitter, muy desprestigiada por su creciente censura. Para lograr destruir Parler fue necesaria la acción coordinada de los monopolios de Silicon Valley de una forma similar a los medios empleados por Rockefeller para imponer el monopolio de su empresa, Standard Oil, sobre la industria del petróleo (9): lo que antaño eran asesinatos, sabotajes y atentados contra oleoductos es hoy censura y borrado de cuentas de los impulsores de Parler, la expulsión de su App de las únicas App Stores -de Apple y Google- y con ello privación del acceso de usuarios de Smartphones, y la destrucción de su infraestructura al expulsarla sin previo aviso de la nube de Amazon haciendo imposible su funcionamiento (10).


“PROYECCIÓN”: La CNN proclamó a Biden vencedor de las elecciones en EEUU mientras aún se estaba llevando a cabo el recuento de votos


FUERA DE CONTROL


Los lazos del Partido Demócrata y Biden con Silicon Valley han sido públicos y notorios: Google/Alphabet, Microsoft, Amazon, Apple y Facebook fueron las empresas que más donaciones hicieron a su campaña electoral -diez veces más que a la de Trump- (11) y sus altos cargos hicieron fuertes donaciones a la campaña del Partido Demócrata (12); además de asegurar la financiación de Biden, Silicon Valley estaba presente en su equipo de campaña electoral, con un alto cargo de Twitter formando parte de su equipo en la campaña electoral (13), y según la revista Time organizaciones en la órbita del Partido Demócrata se reunieron en secreto con el jefe de Facebook repetidas veces durante la campaña electoral para definir medidas para controlar el flujo de información que llegaba a los votantes (14).


Las empresas de Silicon Valley, entre los 10 mayores donantes de la campaña de Biden (FUENTE)


La llegada de Biden a la presidencia de EEUU es solo el principio. Tras su nombramiento, una de las primeras medidas de Biden fue nombrar a un alto cargo de la fundación del fundador de Facebook como parte del equipo de la Casa Blanca (15). El Washington Post, propiedad del jefe de Amazon, y cuyo aparato de seguridad está trufado de ex agentes del FBI, la misma organización que acusó sin pruebas a Trump de ser un agente de Putin, acusación repetida por Biden y Hillary Clinton sin ofrecer la menor prueba (16), ha propuesto utilizar los pasados disturbios de Black Lives Matter para justificar la puesta en marcha de una legislación antiterrorista contra la disidencia interior (17). Por su parte, el New York Times ha pedido a Telegram que aplique a los republicanos y seguidores de Trump la misma censura que el resto de Silicon Valley (18), y Facebook, tras eliminar cuentas izquierdistas, ha anunciado un plan para eliminar contenidos políticos, usando como justificación el asalto al Capitolio (19)


Esta censura fuera de control no se va a limitar a EEUU. En la UE se aprobó en 2019 poner en marcha imponer los llamados “filtros de internet”, y las legislaciones nacionales están próximas a su aprobación: el objetivo de dichos filtros es hacer posible una censura automatizada de contenidos de las plataformas digitales, con la excusa de la defensa de la propiedad privada (20). En la práctica los resultados serán tres: 1) la autocensura, en cuanto empiecen a recibirse denuncias por parte de despachos de abogados especializados; 2) el miedo de quienes pretendan usar contenidos de internet en las redes sociales, al estar constantemente amenazados de sufrir una censura aleatoria y sin sentido, ejecutada por programas informatizados; y 3) la desaparición para siempre de grandes cantidades de contenidos. De esta forma, mientras se pone en marcha un proceso acelerado de digitalización de la sociedad occidental mediante las medidas contra el Coronavirus, internet está siendo transformada en una cárcel digital.


Las donaciones de Silicon Valley a Biden fueron 10 veces mayores que a Trump (FUENTE)


INTERNET ERA UNA TRAMPA


Es importante reflexionar sobre cómo es posible que se haya llegado a esta situación, así como en las consecuencias que tendrá. Empezando por sus consecuencias, que aun no son obvias para la mayoría, una de las mayores es la capacidad actual del poder para acallar las voces críticas. En el pasado, gracias a la invención de la imprenta, siempre fue posible la disidencia clandestina, incluso en los momentos más oscuros del nazismo; desde el poder se usaron todo tipo de medios para intentar impedirlo, pero nunca fue posible acallar del todo a los medios críticos. 


Esta situación cambió con la llegada de la informática, que permite a los estados disponer de medios cada vez más refinados para aplastar las voces críticas. Uno de los primeros fue aplicado por Israel en los años 80 para ayudar a la brutal dictadura de Guatemala: mediante ordenadores se controló el uso de agua y electricidad en las casas de la capital, detectando así dónde había un uso excesivo de ambos, lo que delataba la presencia de una imprenta; el resultado fue la destrucción total de los núcleos urbanos de resistencia a la dictadura (21). Desde entonces, la situación ha empeorado enormemente, ya que la informática ha pasado de ser un instrumento de tecnología punta usado por altas instancias del gobierno a convertirse en la base de todo tipo de objetos de consumo, cuyo uso permite el acceso a las empresas de información valiosísima sobre nosotros, convirtiendo en realidad la distopía del ciudadano de cristal.


En el libro IBM and the Holocaust, su autor Edwin Black explica que, sin el uso de la informática, el Holocausto no se habría podido llevar a cabo, debido a su complejidad logística. Por aquel entonces, debido a lo rudimentario de los métodos, el sabotaje de una sola persona permitió salvar la vida de la mayoría de los judíos franceses (22). Hoy día, la situación se ha invertido, y son las futuras víctimas del abuso de poder quienes están suministrando  voluntariamente a sus potenciales verdugos las informaciones que pueden ser usadas en su contra gracias a las nuevas tecnologías, a pesar de las advertencias de Edward Snowden.


LA SOMBRA DEL PENTÁGONO


El mito de los monopolios de Silicon Valley creados en garajes por jóvenes emprendedores progresistas ha jugado sin duda un papel importante en llegar a esta situación. Sin embargo, ese mito es mentira, ya que en realidad Silicon Valley ha sido creado por el Pentágono mediante programas de investigación financiados por el Departamento de Defensa; fue así como se crearon la internet, el protocolo HTTP, el GPS, los discos duros, los microprocesadores, los microchips, los monitores LCD, SIRI o la pantalla táctil, por poner sólo algunos ejemplos. Como ha denunciado la investigadora Mariana Mazzucato (23), el papel de Silicon Valley ha consistido en privatizar esos descubrimientos y darles una forma atractiva para convertirlos en objetos de consumo integrados en la vida diaria de la humanidad, lo que a su vez permite que el Pentágono y los servicios de inteligencia occidentales aliados a EEUU puedan controlar mejor a su población; por ello no es de extrañar que las empresas de Silicon Valley colaboren estrechamente con la NSA, como destapó Edward Snowden (24), o que Silicon Valley sea uno de los centros de pensamiento reaccionario de EEUU (25). Con razón dice el periódico suizo NZZ que Silicon Valley “no está situado en California, sino en algún lugar entre Wall Street y el Pentágono” (26). Silicon Valley no es más que una tapadera del complejo militar-industrial estadounidense, columna vertebral del imperialismo de EEUU y estrechamente ligado a Wall Street, su corazón financiero. Yasha Levine, autor de El valle de vigilancia. La historia militar secreta de Internet, lo resume en que “las empresas estadounidenses de Internet no son plataformas globales abstractas, sino instrumentos privatizados del poder geopolítico estadounidense” (27).


La colaboración de las redes sociales con la NSA y el Pentágono, según fue denunciada por Edward Snowden (imagen de 2013). DE ARRIBA A ABAJO: las empresas de entonces de Silicon Valley (GOOGLE, APPLE, etc.); las leyes utilizadas para legalizar el acceso ilimitado y discreto a los datos de dichas empresas (PATRIOT ACT, FISA AMENDMENTS ACT); los servicios de inteligencia que tenían acceso a esos datos (FBI, NSA, CIA, etc.); y los programas utilizados para manejar esos datos (Prism, etc.) (FUENTE)


Es precisamente ese componente estratégico lo que ha hecho inevitable el actual enfrentamiento con China, que se ha “atrevido” a cuestionar la hegemonía de Silicon Valley en el mundo digital con el ascenso fulgurante de Huawey, el desarrollo de más patentes que ningún país del mundo en el 5G (siguiente paso de las nuevas tecnologías) y apps como TikTok. EEUU tiene que parar a China, o de lo contrario el Pentágono y sus satélites perderán su hegemonía global en el terreno de las telecomunicaciones, y con ella de la información, el principal pilar del poder.


Según Michael J. Glennon (28), la democracia en EEUU es un mero decorado, ya que la Constitución y el estado de derecho han sido erosionados por cuestiones relacionadas con la  seguridad nacional y burócratas no elegidos (el llamado Deep State). Visto así, y teniendo en cuenta que tanto Trump como Biden defienden la hegemonía, ¿a qué se debe, entonces, el esfuerzo de Silicon Valley por quitar de en medio a Trump? Glenn Greenwald, el periodista ganador del Premio Pullitzer que publicó los documentos que filtró Snowden, nos da la clave: EEUU no es una democracia sino una oligarquía, y las empresas de Silicon Valley y sus aliados disponen de un poder inmenso actualmente (30). Por ello, en lugar de aguantar al outsider bravucón e imprevisible de Trump, han preferido sustituirle por Biden, un servidor fiel del establishment tradicional. Punto.


NOTAS


(1) Pepe Escobar, No hay escapatoria de nuestro mundo tecno-feudal.


(2) Kari Paul (The Guardian, 30.10.2020): Here are all the steps social media made to combat misinformation. Will it be enough?.


(3) Ben Schreckinger (Politico, marzo/abril 2017): World War Meme. How a group of anonymous keyboard commandos conquered the internet for Donald Trump—and plans to deliver Europe to the far right.


(4) Emma-Jo Morris/Gabrielle Fonrouge (New York Post, 14.10.2020): Smoking-gun email reveals how Hunter Biden introduced Ukrainian businessman to VP dad.


(5) Chris Fox (BBC, 15.10.2020): Twitter and Facebook’s action over Joe Biden article reignites bias claims.


(6) Molly Bal (Time, 04.02.2021): The Secret History of the Shadow Campaign That Saved the 2020 Election.


(7) Paul Bedard (Washington Examiner, 24.22.2020): Trump would have won 311 Electoral College votes if media weren’t biased: Survey; Resultados de la encuesta: National Post-Elect Survey Results 2020 General Election Voter. November 2020; Ewan Palmer (Newsweek, 16.12.2020): Majority of Americans Think Hunter Biden Story Was Ignored by Media: Poll. Abram Brown (Forbes, 15.10.2020): You Haven’t Heard More About Hunter Biden’s Emails Because Twitter And Facebook Didn’t Want You To.


(8) https://twitter.com/Snowden/status/1347224002671108098; https://twitter.com/jack/status/1349510769268850690; Jaclyn Diaz (NPR, 14.01.2021): Jack Dorsey Says Trump’s Twitter Ban Was ‘Right Decision’ But Worries About Precedent; Keith Griffith (Daily Mail, 17.01.2021): REVEALED: ‘Reluctant’ Twitter CEO Jack Dorsey permanently banned Trump when colleagues said ‘letting the President have an account is like IBM working with the Nazis’.


(9) James Warren (Chicago Tribune, 08.05.1998): The Game of Monopoly from Rockefeller to Gates; Ida M. Tarbell, The History of the Standard Oil Company, 1905; Wikipedia, Standard Oil.


(10) Glenn Greenwald (12.01.2021): Cómo Silicon Valley, en una demostración de fuerza monopolística, destruyó Parler; Mike Huckabee (13.01.2021), Cómo se coordinaron los gigantes tecnológicos para aplastar a Parler; Ron Paul (11.01.2021): La ‘guerra contra el terrorismo’ vuelve a casa.


(11) S&P Global (07.10.2020): Donors affiliated with Amazon, Big Tech throw support behind Biden campaign.


(12) Yahoo News (16.12.2020): Big Tech executives donated big money to Biden, did not donate to Trump.


(13) Bloomberg (18.09.2020): Twitter Executive Joins Biden’s Transition Team: Campaign Update.


(14) Time (04.02.2021): The Secret History of the Shadow Campaign That Saved the 2020 Election (traducción al español).


(15) ZDNet (05.01.2021): Open-source developer and manager David Recordon named White House Director of Technology.


(16) The Intercept (11.02.2021), Former FBI Officials tapped for Amazon’s growing Security Apparatus; The Hill (21.02.2020): Clinton calls Trump ‘Putin’s puppet’ amid reports of Russian interference in 2020 election; NBCNews (07.09.020): FBI agent who helped launch Russia investigation says Trump was ‘compromised’; BioBio (29.09.2020): “Un bochorno”: Trump y Biden chocan en primer debate lleno de insultos y acusaciones; U.S. department of Justice: Report On The Investigation Into Russian Interference In The 2016 Presidential Election.


(17) David Ignatius (Washington Post,  09.02.2021): Biden needs to figure out how to manage the Trump endgame.


(18) Michael Schwirtz (New York Times, 26.01.2021): Telegram, Pro-Democracy Tool, Struggles Over New Fans From Far Right; Business Insider (12.01.2021): Telegram hits 500 million active users following backlash over WhatsApp’s changing privacy policy.


(19) Politico (10.02.2021): Facebook to pilot new ways to reduce political content. Caitlin Johnstone, El péndulo de la censura en internet vuelve a apuntar a la izquierda.


(20) Simona Levi (La Vanguardia, 11.04.2018): Contra el filtrado de contenido en internet.


(21) Jan Nederveen Pieterse (1984): Israel’s Role in the Third World. Exporting West Bank Expertise; Al Jazeera (05.06.2003): Israel’s Latin American trail of terror; George Black (25.09.2007): Israeli Connection - Not just Guns for Guatemala; Middle East Monitor (05.10.2015): Israel’s role in the Guatemalan genocide; Cheryl Rubenberg (MERIP - (Middle East Research and Information Project) Nr. 140, Mayo/Junio 1986): Israel and Guatemala. Arms, Advice and Counterinsurgency.


(22) Rabioso, René Carmille, el hacker que saboteó el Holocausto nazi.


(23) Bruce Upbin (Forbes, 13.06.2013): Debunking The Narrative Of Silicon Valley’s Innovation Might; Mark Piesing, La historia secreta de Silicon Valley.


(24) T.C. Sottek y Janus Kopfstein (The Verge, 17.07.2013): Everything you need to know about PRISM. A cheat sheet for the NSA’s unprecedented surveillance programs.


(25) Shuja Haider (29.03.2017): La “ilustración oscura” y las ideologías elitistas y racistas del capitalismo de las nuevas tecnologías.


(26) Evgeny Morozov (NZZ, 07.01.2020): Das Silicon Valley liegt nicht in Kalifornien, sondern zwischen Wall Street und Pentagon.


(27) Yasha Levine (01.04.2019): Silicon Valley y las “armas de comunicación bélicas”. Yasha levine (2018), Surveillance Valley. The Secret Military History of the Internet.


(28) Jacob Hornberger (15.12.2020): El establishment de seguridad nacional ha tomado el control.


(29) Michael J. Glennon (2014): National Security and Double Government.


(30) Glen Greenwald: La amenaza no es Trump, sino concentrar el poder económico y la información en unos pocos monopolios.

ECONOMÍA